16 de marzo de 2007

Miedo

Hay una serial que me fascina ... se llama HOUSE M.D. Les juro que es demasiado buena, se trata de un doctor poco ortodoxo y de su equipo y ahi van viendo como sanar a los enfermos que Gregory House (el protagonista) elige. Y hay una doctora del equipo de House que le tiene un miedo profundo a la muerte, de hecho, cada vez que tiene que dar una mala señal se acobarda y no puede cumplir su misión. Creo y estoy segura que en este momento me sucede lo mismo. Siento una fuerte cobardía al seguir mi camino.
Me acuerdo cuando me sentía al ir al primer día de clases en el colegio cada año, dolor de estómago, me sentía rara, no sabía con quien me iba a topar, no tenía idea quienes iban a ser mis profesores, y peor aún, no sabía cual iba a ser mi desafío ese año.
Creo que ahora me pasa lo mismo, pero con algunos cambios, se cuál es mi desafío.
Mi desafío soy yo misma, mi cuerpo, mi alma y mis convicciones. Ese es mi nuevo desafío, simplemente yo. En la universidad valgo yo por mi misma y no por las cosas que pueda haber hecho antes de llegar a la U.
Todo cambia en este momento, todo tiene otro sentido, algo más liberal pero con una presión bastante más fuerte que antes. En el colegio tienes miles de posibilidades, aquí solo dos... una te la das tu y otra la U. Pero aún así, tengo que ser la mejor. Ese es mi mayor desafío, ser la mejor y ser mejor.
He aprendido de muchos de mis errores, muchos errores, algunos como la soberbía y como la poca comunicación o algunas veces la extrema, pero si sé que tengo tantas posibilidades de ser mejor.
Estoy en una etapa de crecimiento tan fuerte que no tengo idea para dónde iré, sólo se que camino y que avanzo, pero no se.
Como dicen algunos, lo único seguro es que nos vamos a morir, pero esa no es mi política, es algo que se dice cuando nadie más tiene esperanza. Tengo esperanza, muchísima, ahora solo me toca continuar, caminar, seguir, avanzar, y todos los verbos que encajen en lo que estoy escribiendo.
Me declaro miedosa, no sé a lo que voy, sólo sé que soy yo, que me llamo María de los Ángeles, que tengo 18 y que tengo tantas ganas de aprender y de ser mejor que no se hasta donde pueda llegar.




ARRE VOI

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